Reuniones paralelas

15 de enero de 2014

Los presidentes del Perú y Chile han emprendido un ciclo de encuentros con sectores representativos y líderes de opinión con miras al próximo fallo de la Corte de La Haya

En este marco, el presidente Ollanta Humala mantuvo hace dos días en Palacio de Gobierno una reunión con los directores y representantes de 16 medios de comunicación. Este encuentro, que se prolongó por tres horas, incluyó un informe sobre la realización del proceso ante la Corte Internacional de La Haya a lo largo de seis años y una hipótesis ante los dos escenarios que podrían presentarse, uno de los cuales será anunciado por la Corte el 27 de enero. Sea cual fuere –afirmó el mandatario– debería unir más a Perú y Chile.

El Presidente de la República hizo también un pedido de unión y serenidad a los concurrentes a la reunión, a fin de que los días previos al fallo transcurran en un clima adecuado y, conocido el mismo, no se produzcan reacciones fuera de lugar. Como se sabe, cuanto diga la Corte tiene carácter obligatorio e inapelable. Tal vez alguno de los países presente un recurso de aclaración, pero ello no variará un milímetro los alcances de la sentencia que, aunque es de ejecución inmediata, puede que requiera la modificación de algunas normas.

Tal como destacó nuestro director, Gustavo Mohme Seminario, al término del encuentro, el espíritu de la reunión fue el de anteponer los intereses nacionales antes los de otro tipo. “Los peruanos deben tener la seguridad de que cualquiera sea el resultado, vamos a ganar porque se van a cerrar 140 años de historia de un litigio. Esa es una buena noticia”, aseguró. Añadió que el fallo pasará por un proceso que deberá ser interiorizado por la sociedad, pero sin que ello signifique discusiones sobre la frontera trazada.

Hay que destacar que, en Santiago de Chile, el presidente Piñera ha abierto un ciclo similar de reuniones. Así, esta semana se reunió con los tres ex presidentes del país, en tanto que la semana pasada lo había hecho ya con la señora Michelle Bachelet, presidenta electa. Y hace dos días recibió en el Palacio de La Moneda a los representantes de los partidos políticos, ante los cuales recalcó la obligatoriedad de “acatar el fallo –cualquiera que sea–, e implementarlo de buena fe y en un plazo razonable”.

Por su parte, el senador José Antonio Gómez, presidente del Partido Radical y portavoz de los dirigentes de los partidos presentes en la reunión, señaló: “Hemos definido actuar con unidad, ponernos todos los partidos tras el Presidente de la República, entendiendo que esta es una tarea del Estado y que debemos trabajar juntos, esperando que este fallo sea, como corresponde, en derecho”.

En cuanto a la vocera del gobierno chileno, Cecilia Pérez, insistió sobre el carácter obligatorio que tendrá el fallo para Chile y Perú y que, “independientemente de cuál sea la orientación de la sentencia, los dos países hermanos continuarán su relación comercial y diplomática”. En este clima constructivo, la nota discordante dada por el diputado chileno Jorge Tarud –quien insinuó que el contenido del fallo habría sido filtrado al Perú– carece de importancia.

Destaquemos, para terminar, la actitud de madurez adoptada por los alcaldes de Arica, Salvador Urrutia, y Tacna, Fidel Carita Monroy, quienes se han puesto de acuerdo para no promover ningún tipo de actividad extraordinaria para el próximo 27 de enero. Ambas poblaciones, de economías complementarias y separadas apenas por 56 kilómetros, esperarán la lectura de la sentencia con calma y prudencia. Un ejemplo que se debe seguir.