PERU: El cuarto puesto de la carrera

Uno de los sitios más atractivos de la elección

Así como la lucha entre Pedro Pablo Kuczynski y Alan García para ver quién pasa con Keiko Fujimori a la segunda vuelta, la otra pelea interesante de la campaña electoral que está por empezar es por el cuarto puesto, un trofeo que le puede generar a su propietario más de una satisfacción, alguna realmente impensada.

Este cuarto puesto de la competencia no es, obviamente, un lugar definitivo, pues los procesos electorales son dinámicos y nada está definido hasta las cuatro de la tarde del domingo de la votación.

Pero quien logre encaramarse primero en ese cuarto puesto puede convertirse en una de las figuras estelares de la competencia.

Primero, porque viene de atrás, lo que implica que puede seguir trepando en la carrera. Quien logre ser el cuarto competidor con claridad –y no como ahora, que es un espacio en el que se apechugan varios– recibirá la atención especial de los reflectores de los medios y las miradas de la opinión pública.

Incluso, quien se apodere de ese cuarto puesto producirá la expectativa de que, al primer traspié de los tres punteros, podría meterse en el pelotón delantero. Y ya se sabe que en las elecciones peruanas todo puede acabar sucediendo.

En este sentido, quien se apodere primero del cuarto puesto tendrá la oportunidad de presentar sus propuestas en foros calificados en los que, por razones obvias, no se puede invitar a diez candidatos.

Uno de ellos es la Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE) 2015 que se realizará en Paracas en los primeros días de diciembre, el cual es diseñado en cada año preelectoral con la participación de los cuatro principales candidatos presidenciales que son invitados por su ubicación en las encuestas de intención de voto en la opinión pública.

Quien se ubique en ese cuarto puesto podría no ganar, evidentemente, pero sí crecerá su posibilidad de acabar teniendo una bancada parlamentaria pequeña (diez curules, por ejemplo) pero poderosa pues permite colocarse como el fiel de la balanza en un Congreso fragmentado como el que, sin duda, será el del próximo lustro político.

Así, quien al final de la competencia termine en el cuarto puesto, tendría una presencia política importante gracias al papel decisivo que podría tener su bancada parlamentaria, y podría colocarse muy bien para la siguiente elección.

¿Quién podría ser el que ocupe ese cuarto puesto? Difícil saberlo, pero por ahí andan, según las encuestas, César Acuña, Daniel Urresti y Alejandro Toledo, mientras que aún en el rubro otros, anda más de un aspirante a outsider.