Cabe indicar que esta denuncia se entabla tras la difusión de un reportaje sobre la investigación de los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz, quienes siguieron de cerca el caso de cuatro menores de edad (y otros muchos más testimonios de estudiantes) pertenecientes a la comunidad apostólica católica “Sodalicio de Vida Cristiana” que habrían sido violados sexualmente nada menos que por el fundador y máxima autoridad de esta comunidad, Luis Fernando Figari, y cuyas denuncias presentadas ante el tribunal que representa Cipriani, jamás habrían sido derivadas a la autoridad competente, pese a que fueron interpuestas hace cuatro años. Nada hizo el cardenal en todo este tiempo.
Junto con Cipriani, también han sido denunciados por los mismos delitos: Víctor Huapaya Quispe, vicario judicial y presidente del Tribunal Eclesiástico del Arzobispado de Lima, y Enrique Elías Dupuy, procurador del Sodalicio de Vida Cristiana, quienes se habrían coludido para buscar la impunidad y seguir promoviendo delitos similares contra cientos de indefensos estudiantes, niños y adolescentes.
Estos casos, que han remecido los cimientos de la Iglesia Católica del Perú y el mundo, fueron conocidos gracias a una prolija investigación que duró cinco años, dirigida por el periodista Salinas con el apoyo especial de su colega Paola Ugaz, quienes han volcado en un libro titulado “Mitad monjes, mitad soldados” una serie de nuevos y deleznables casos ocurridos en el Sodalicio de Vida Cristiana.
El IDDEREM informó que es la 30ª Fiscalía Provincial Penal de Lima la que ha asumido la denuncia para las investigaciones del caso, y ha hecho un llamado a todas las instituciones tutelares del país, al Colegio de Abogados de Lima, a las universidades y autoridades competentes, para estar alertas y vigilantes, en nombre de todos los niños del país, frente a esta grave denuncia, para que se desarrolle sin presiones ni interferencias, y con todo el rigor que exige la Ley.
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