La segunda vuelta para presidir Cusco tendrá de protagonista a Benizio Ríos (Movimiento Regional Acuerdo Popular Unificado, la pelota de fútbol) con casi 24%. Ríos ha sido alcalde de Urubamba en los dos períodos pasados. En el primero fue expulsado del cargo acusado de nepotismo, y vacado por el JNE. Pero luego fue reelegido.
Se afirma que la actividad política de Ríos está financiada, hoy como ayer, como en el caso de todos los alcaldes de Urubamba, por el monopolio de los buses a Machu Picchu, Consettur Machu Picchu SAC, con unos US$30 millones de ventas anuales, y sin competencia alguna a la vista.
Ríos llegó a Urubamba desde Ollantaytambo, donde también tuvo cuestiones legales. Ha seguido con acusaciones. En Urubamba sigue una acusación que incluye haber triplicado su sueldo de alcalde.
El anterior presidente de la región Cusco, Jorge Acurio, fue expulsado por la vía judicial en diciembre del año pasado, acusado de sustracciones y otras peripecias similares pendientes. El presidente previo a Acurio, Hugo Gonzales Sayán, sigue en la cárcel de Q´enccoro, por robos mientras presidía la región, Y así retrospectivamente.
Sin duda Cusco es un premio mayor en el juego de política y maquispaismo. Pues hay los ricos cánones mineros de Camisea y Tintaya, además del que se viene desde Las Bambas, más los ingresos de Machu Picchu y el resto del turismo en la zona. A todo lo cual es importante añadir lo que ya está rindiendo el teje y maneje inmobiliario en torno al futuro aeropuerto de Chinchero en las alturas, al filo del valle de Urubamba.
Pero la mayor sorpresa cusqueña de estos días es que el partido de izquierda Tierra y Libertad, conocido sobre todo por su performance cajamarquina, ha ganado la alcaldía provincial de Urubamba, el eje administrativo que controla los distritos de Machu Picchu y Chinchero, donde se construirá el aeropuerto de US$500 millones.
El nuevo alcalde TyL de Urubamba es Humberto Huamán, sentenciado por delitos varios a cuatro años de cárcel como alcalde de Chinchero 2006-2010. Luego pasó a ser presidente de la principal comunidad de Chinchero, que el año pasado cobró los casi S/.200 millones que desembolsó la región Cusco por la superficie necesaria para construir el aeropuerto.
A la luz de esta victoria electoral se dice que en toda la zona cientos de millones de dólares de inversiones en hoteles, trenes y otros proyectos turísticos, más la ampliación de muchos de los negocios existentes, han entrado en compás de espera. Huamán le ganó por 180 votos a Luis Alberto Valcárcel, de Acción Popular.
La combinación de funcionarios con gran kilometraje, partidos radicales y grandes expectativas empresariales promete problemas por el camino.
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