LOS HUAICOS.
Empezaba a preparar un trabajo elaborado sobre la tragedia ambiental que vive el Perú, el título sería "los huaicos: la venganza de los ríos" o "la furia de los Andes: del campo a la ciudad". El hecho es que los huaicos están destruyendo la vida de miles de familias vulnerables de la sociedad quienes todavía no entienden las causas principales de esta tragedia otro que no sea el abandono de sus pueblos por los políticos corruptos de Lima que por medio de mafias (partiduchos del crimen organizado) y las FFAA, controlan y centralizan el poder.
Esta crisis ha desnudado a la gran burguesía. No pueden atar ni desatar. Pero si son buenos para promover su carrera política haciendo el papel de Robin Hood de los pueblos que pasan sed y hambre. Hasta la vaga Fujimori, que nunca ha trabajado en su vida, se da poses de cocinera. Kenji ya está montado en un tractor como el ladrón de su padre el 90. Sería mucho más significativo si estos sinverguenzas devuelvan por lo menos el 1% del dinero robado por su padre (6 millones de dólares) para comprarles una casa prefabricada a cada familia damnificada.
Ni Dios, Jehova, Moisés, Mahoma o Mickey Mouse causaron está tragedia. Es la deforestación de la Amazonía, es la industrialización de países poderosos como EEUU y China que vienen quemando en grandes cantidades fósiles de carbón, es el capitalismo que viene destruyendo la vida de los humanos. Es todo eso que ha causado el calentamiento global, de tal manera que en Perú los glaciales se derriten, el mar (la corriente del Niño) se calienta, evaporándose a la atmósfera para luego precipitarse creando lluvias torrenciales que se arrastran a los ríos causando huaicos y zozobras. ESO ES. Al fin los culpables son los gobernantes ladrones y lacayos que se negaron siempre a educar, proteger, mitigar y prevenir al pueblo de los desastres naturales.
Los propagandistas del régimen, la prensa basura, nos piden que nos pongamos a la cola del gobierno que en lo esencial se ocupa de defender sus intereses de clase, piden al pueblo que se callen, que no critiquen y que se unan a su agenda de administrar la crisis pero no resolver nada. Nos dicen que el problema solo es de barro y tierra cuando en realidad el agua potable de Lima está contaminada con metales tóxicos de los relaves desbordados por los huaicos o deslizamientos de sedimentos en los ríos.
La misma subsistencia de Lima como ciudad está seriamente cuestionada por el potencial deslizamiento de lagos artificiales o depósitos llenos de relaves tóxicos de las minas. No es solo uno sino hay más de 500 localizados muy cerca a las fuentes fluviales y minas activas e inactivas (abandonadas), todos descargando a los ríos principales que abastecen de agua potable a las ciudades del centro del Perú y Lima.
El Perú debe pedir ayuda técnica a la ONU y EEUU para resolver este problema inmediatamente. Se pueden construir muros de contención y sistemas de detección de escapes, o talvez si es técnicamente posible sacar y llevar los relaves tóxicos a otros lugares. Una laguna llena de relaves con plomo, mercurio, arsénico, PCBs, etc. colapsa y descarga al río Rimac será un arma de extinción masiva. Adiós Lima
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