martes, 14 de febrero de 2017

Falta que vayan por García y Fujimori


Economista Pedro Francke señala que no hubo una dedicación en investigar corrupción del último régimen aprista y de la cleptocracia fujimorista de los 90.
Francke: Falta que la justicia vaya por García y Fujimori,que se investigue a todos por igual. Foto: John Reyes
Foto: John Reyes
LUIS REVOREDO
El economista Pedro Francke destaca la orden de detención dictada para el expresidente Alejandro Toledo y pide el mismo empeño para las otras corruptelas de Odebrecht y de otras empresas en el último gobierno aprista y en la dictadura de los 90. Advierte también en esta entrevista sobre la designación de dos personajes poco confiables y pro-empresariales como miembros de la comisión de selección de los presidentes de organismos reguladores de la actividad privada que deben velar por los intereses del Estado y la comunidad. “Es esencial asegurar que los organismos reguladores estén en manos de gente capaz y proba, pero tal como se ha nombrado este comité de selección, eso no va por buen camino”, manifiesta.
—¿Qué opina sobre la reciente resolución ministerial firmada por el premier Fernando Zavala, que designa a los integrantes de la comisión de selección para la designación de los presidentes reguladores?
—Los organismos reguladores, como Ositran, Osiptel, y demás, cumplen un rol muy importante. De ellos depende no haya tarifas abusivas y haya competencia, lo que en el pasado muchas veces no se ha cumplido. Todos sabemos que las tarifas telefónicas en el pasado han tenido niveles elevados y la competencia se ha dificultado muchísimo. En el caso de Ositran, ha cumplido un rol clave en todas las asociaciones público privadas (Apps) de transportes y notoriamente en el caso reciente de la adenda del aeropuerto de Chinchero, donde la presidenta de Ositran, actuando profesionalmente en defensa del interés público, se manifestó en contra de la adenda, pero lastimosamente los otros dos miembros cambiaron de opinión a último momento para favorecer a Kuntur Wasi.
Es esencial asegurar que los organismos reguladores estén en manos de gente capaz y proba, pero tal como se ha nombrado este comité de selección, eso no va por buen camino.
—¿No es un grave error, por decir lo menos, que se haya designado para esa importante comisión a Enrique Felices, quien, según un diario local, ha sido apoderado de la empresa brasileña OAS, una de las sospechosas de haber repartido sobornos a funcionarios estatales?
—Definitivamente. En primer lugar, es evidente que hay un fuerte conflicto de interés en el caso de Enrique Felices, en el pasado funcionario de confianza de esta constructora brasileña, cuyas ganancias depende en buena parte de lo que haga Ositran. El gobierno no está dando las señales contra la corrupción que son claves en estos momentos.
—Otro caso que llama la atención es la designación para la citada comisión, de Fiorella Molinelli, viceministra de Transportes y una de las gestoras de la cuestionada adenda al contrato del aeropuerto de Chinchero. ¿Qué opina al respecto?
—Efectivamente, Fiorella Molinelli ha jugado un rol clave en la cuestionada adenda de Chinchero. Su pasado la muestra muy claramente vinculada a la Confíep y las grandes empresas. Para nada tiene la independencia que se requiere para evitar que sigan estas “puertas giratorias” en las que las grandes empresas obtienen ventajas de los organismos reguladores, porque los funcionarios que ahí se nombran han trabajado antes -o trabajarán después- para ellas.
Fiorella Molinelli: hay personas poco confiables.
Fiorella Molinelli: hay personas poco confiables.
PUERTA GIRATORIA
—¿No es un craso error nombrar a funcionarios que alternan sus labores profesionales con empleos en empresas privadas, y justo cuando ha quedado claro el rol protagónico del afán de lucro empresarial como causa de la corrupción?
—Esta situación, que se ha dado por llamar “puerta giratoria”, es claramente una en la que se facilita que intereses privados tuerzan el interés público generando corrupción. Es algo muy negativo. En el Movimiento Nuevo Perú estamos totalmente en contra de esta práctica; debe eliminarse.
—La lideresa del Movimiento Nuevo Perú-Frente Amplio, Verónika Mendoza, ha planteado que el problema de la corrupción se debe en gran medida a que bajo la constitución neoliberal el Estado está al servicio de los negocios privados y no de las necesidades de la población, por lo que la clave del problema está en cambiar el modelo económico cambiando la Carta Magna. Como economista, ¿tiene validez el argumento, o debemos continuar bajo el esquema de que solo la inversión privada genera desarrollo y hay que seguir dándole plenas facilidades?
—El hecho de que la corrupción haya prevalecido y aumentado desde la Constitución fujimorista de 1993 no puede considerarse una casualidad. Desde luego, hay en primer lugar una responsabilidad individual de quienes hayan estado metidos en corrupción, peor todavía si son presidentes o ministros o altos funcionarios. Pero no es coincidencia esta repetición de corruptelas en las APPs. Hay un sistema corrupto, que permite adenda tras adenda, que permite pasar por encima de la Contraloría, todo ello bajo el pretexto de “destrabar” inversiones por los excesivos trámites y regulaciones. Hoy vemos claramente que no habido demasiados controles sino, me parece que eso es obvio. Y todo este descontrol y esta desregulación, han favorecido la corrupción. Hay acá corresponsabilidad de una ideología neoliberal, que pone a las grandes empresas y la Confiep como los únicos salvadores de la patria, y de intereses corruptos muy específicos, que se juntan detrás de esa desregulación pro-monopolios.
—Hay algunos opinólogos que quieren introducir la idea de que la causa de la corrupción es solo la debilidad o la corrupción de los partidos, ¿no está alineándose sutilmente con Odebrecht, cuyo principal argumento es alegar que tuvo que pagar sobornos para poder obtener contratos? ¿Eso no equivale a darle a Odebrecht categoría de víctima?
—Los primeros responsables de la corrupción son los que participan directamente en ella, empresas como Odebrecht, su club y sus socias, y los que no solo aceptaron sino hoy vemos que buscaron activamente las coimas. Debemos dejar eso primero bien en claro.
Pero debemos ver que no son casos aislados, hay un sistema montado de corrupción, que ha llegado a su extremo con las APPs y sus decenas de adendas, todo bajo la idea de que si es privado es mejor, cuando el negocio privado en este caso consistía en robarle al Estado, es decir, a todos los peruanos.
—Hay quienes piensan que también sobornan por adelantado al aportar a las campañas electorales para conseguir después negociados…
—Este sistema de corrupción también se reproduce cuando las campañas electorales permiten financiamiento totalmente oscuro, para que empresarios corruptos pongan plata en la campaña para luego sacar jugosos contratos. Esa es responsabilidad de los empresarios sucios pero también de los políticos que buscaron, aceptaron y usaron ese dinero, como fue el caso de varios millones que llegaron de un llamado “Liberty Institute” a la campaña de Kekio Fujimori la campaña pasada.
—Ciertos analistas se empeñan en usar como argumento para su tesis que hasta Verónika Mendoza está supuestamente involucrada en la corrupción. ¿Qué le parece?
—No tiene ningún sentido. Es totalmente absurdo.
García y Toledo, la investigación debe ser igualitaria.
García y Toledo, la investigación debe ser igualitaria.
JUSTICIA NO PUEDE LIMITARSE
Si es necesario, PPK debe ser investigado
—Hay quienes sostienen que no hay que meterse con PPK porque se estaría así sirviendo al presunto plan fujimorista de vacarlo. ¿Qué le parece este razonamiento?
—Bueno, habría que recordar en primer lugar que Alberto Fujimori está condenado por corrupción y que quien fue secretario general de Fuerza Popular, Joaquín Ramírez, está investigado por lavado de activos y tiene varias empresas off-shore para tal efecto. El fujimorismo no tiene ninguna autoridad moral en este terreno.
La justicia no puede limitarse por ninguna causa. Ya no estamos en tiempos en los cuales los reyes estaban por encima de la justicia y podían hacer lo que les daba la gana. El país tiene que limpiarse de la corrupción. Tenemos que estar seguros que nuestras autoridades ya no están metidas en chanchullos de ningún tipo.
—Entonces ¿PPK puede ser investigado?
—Lamentablemente, nuestro actual presidente PPK jugó un rol importante, como ministro de Economía y Finanzas primero, y como premier después, en el gobierno de Toledo, participando en reuniones claves para la aprobación de la Interoceánica, uno de los grandes negociados de Odebrecht. Nadie debe temer a ser investigado, porque como bien dice el dicho, “el que no la debe no la teme”. Esto debe aclararse por el bien de la nación, con el mayor respeto a la alta investidura que hoy detenta, pero insisto, la justicia y la verdad deben prevalecer.
ALGO MÁS
—¿Cómo ve el desarrollo de la investigación de la Fiscalía sobre la corrupción de Odebrecht? 
—El haber logrado el mandato de detención de Alejandro Toledo es algo positivo, sin duda. Pero no se ve la misma prisa en la investigación del caso Odebrecht con los colaboradores de Alan García, como Jorge Cuba, así como otras pistas como el llamado “cristo de la corrupción” que Odebrecht le regaló a Alan García justo cuando se firmaban más adendas. Tampoco se ve que estén haciendo nada en relación a la enorme cantidad de obras de Odebrecht durante gobierno de Fujimori.
ADEMÁS
—¿La investigación avanzará hasta tocar a García, diestro en escapar de la justicia, Humala y hasta Kuczynski?
—Eso solo se logrará si hay una fuerte presión ciudadana. Por eso la importancia de la marcha convocada para el 16 de febrero contra la corrupción. Falta que la justicia vaya por García y Fujimori. Es urgente que se investigue a todos por igual

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